domingo, 25 de abril de 2010

Hay que reflexionar en las fallas del samsara

Generalmente, un practicante empieza con la meditación en los preliminares generales, también llamados "Las cuatro reflexiones que apartan a la mente del samsara". Éstas consisten en la reflexión de: la preciada vida humana, la muerte y transitoriedad -que se mostró la semana pasada-, el karma y las fallas del samsara.

Esta semana queremos compartirles una breve enseñanza acerca de cómo reflexionar en las fallas del samsara. Que lo disfruten.

Bonita semana a todos.

“¿Cuál es el problema del samsara? Antes que nada, ¿qué significa samsara? Significa océano de sufrimiento, pero lo que en verdad quiere decir es aferramiento al yo –océano de aferramiento al yo. Cuando te aferras a tu propia identidad, te encuentras en el samsara, cuando no te aferras a tu propia identidad, no estás en el samsara. Esto es muy fácil de comprender, la clave es el aferramiento al yo. ¿Pero cuáles son las fallas? ¡Yo! [cuando decimos] '¡ay!, tengo este problema', '¡ay!, alguien me está diciendo tal o cual cosa', '¡ay!, tengo esta expectativa que no se cumplió'… cada vez que tenemos un deseo o que tememos algo, sufrimos. Éste es el punto de las fallas del samsara. Pero la segunda falla [del samsara] es aún peor: tenemos muchas emociones negativas que surgen de este yo –enojo, envidia, etcétera. Esto también es algo terrible del samsara. Así que también debemos reflexionar una y otra vez acerca de los problemas de estar en el samsara; esto es muy importante porque reflexionar en ello nos ayuda a entrenar nuestra mente; pues muchas veces no podemos domar nuestra mente y disciplinarla porque amamos demasiado estas cosas. Pero cuando trasciendes todas estas fallas del samsara a través de la reflexión en ello, tu mente está domada y bien disciplinada.”

domingo, 18 de abril de 2010

Tres puntos para reflexionar en la transitoriedad

Esta semana queremos compartir con ustedes unas enseñanzas acerca de cómo asimilar la transitoriedad, en este caso, a partir de la reflexión en la muerte, que, de acuerdo con las enseñanzas, nos ayuda a darle propósito a nuestras vidas y a disipar la pereza.

Esperamos les sea de utilidad. Bonita semana a todos.


"Cuando empezamos a domar nuestra mente surgen obstáculos. El primer obstáculo es que tenemos muchas preocupaciones y muchos deseos que tienen que ver con esta vida. Hacemos muchos planes, pero todos son para obtener cosas en esta vida. Así que [primeramente] debemos desapegarnos un poco de esta vida. ¿Cómo?, pensando en la transitoriedad. Para reflexionar acerca de la transitoriedad generalmente se estudian nueve formas, pero para simplificar, podemos cultivar tres puntos: 1) la muerte es algo certero, 2) cuándo moriremos es incierto, 3) al momento de morir lo único que nos puede ayudar es el entrenamiento o la práctica del Dharma; otras cosas relativas, como las riquezas, el renombre o la fama no nos podrán ayudar al morir. Éstos son los tres puntos en los que hay que reflexionar, y hay que elaborar en ellos, imaginar, enfocar [nuestra atención en ellos], pensar una y otra vez: es seguro que voy a morir, pero no sé cuándo, y en el momento en que muera, ¿qué es lo que en verdad me puede ayudar?"

domingo, 11 de abril de 2010

La mente es engañosa

Esta semana queremos fomentar la reflexión acerca de nuestra motivación para practicar, pues en muchas ocasiones nuestra mente puede ser engañosa.

Bonita semana a todos.


(paráfrasis)

"Me he dado cuenta de que en el Dharma hay muchos niveles de práctica. Algunos pueden pensar que practicar el Dharma no tiene mayor complicación. Por ejemplo, cuando estamos tensos meditamos para sentirnos bien, sin que importe la motivación ni la dedicación, sólo buscamos quitar el estrés. Pero entonces podemos pensar ¿por qué el Buda enseñó el Dharma? En general, la respuesta es “para iluminarnos”, ¿pero qué significa esto en realidad? Trata de visualizar esto. En el sendero [del Dharma] se habla mucho acerca de la ausencia del “yo”, pero hablar de la ausencia del “yo” y verdaderamente actuar como si no hubiera un yo es muy diferente. Podremos pensar mucho en la ausencia del “yo”, pero empezar a actuar de manera altruista es muy difícil. En primer lugar, porque nuestra mente es muy engañosa. Por ejemplo, a veces pensamos que queremos ayudar a la gente para serles de beneficio, pero si examinamos, en el fondo hay un interés personal, ¿en realidad queremos ayudar a estas personas? Esto también sucede en el Dharma, pues la mente es la mente, sin importar si se trata de cuestiones mundanas o del Dharma. Es importante reducir este interés personal. [Por ello] trata de ver qué tan engañosa es tu mente."

domingo, 4 de abril de 2010

Dos cosas para tener en mente

Esta semana queremos compartirles una breve enseñanza acerca de dos cuestiones que debemos tomar siempre en cuenta en todos los aspectos de nuestra vida cotidiana para seguir integrando el Dharma en nuestras vidas. Que lo disfruten.
Feliz semana.
(más abajo se encuentra la traducción)


Cuando se habla de cómo practicar bien el Dharma en nuestra vida cotidiana siempre se habla de dos cosas que se deben tomar en cuenta en todo momento. La primera es la transitoriedad; cada vez que veas a tus familiares o amigos o que vayas a algún lugar, no te olvides de la transitoriedad. La segunda es -cuando somos practicantes de la visión de la ausencia del yo o del vacío- tratar de recordar con frecuencia que todo es una ilusión, que todo es como un sueño. Creo que tratar de percibir las cosas bajo estos dos aspectos nos será muy útil para lograr el entendimiento del vacío o la naturaleza de la mente.